Por Ricardo Ruiz
En mayo no solo sube la temperatura. También suben los nervios en las empresas que no tienen lista la PTU.
Y es que repartir utilidades no es un favor, ni un “a ver si alcanza” … es una obligación constitucional, con multa incluida si se ignora.
¿Tu empresa ganó dinero? Entonces es hora de cortar el pastel. Literal.
Porque de la utilidad fiscal, el 10% es para los trabajadores.
Y no, no se reparte “como Dios te dé a entender”. Hay reglas, límites y hasta fórmulas… que si se aplican mal, pueden salir más caras que el mismo reparto.
¿Por qué debería importarte?
Porque el SAT no perdona, la Secretaría del Trabajo no olvida, y los empleados (cuando se organizan) tienen mejor memoria que tu contador.
Y aunque tú no hagas el cálculo directamente, la responsabilidad final sigue cayendo en tu escritorio.
¿Cómo se reparte?
Piensa en un pastel:
Primero defines su tamaño (10% de la utilidad fiscal, no contable). Luego lo partes en dos mitades: Una se reparte según días trabajados. La otra según sueldos anuales.
Listo… bueno, casi.
Los ingredientes que muchos olvidan:
- Usan la utilidad contable (error de receta).
- No cuentan días de maternidad o incapacidad por riesgo de trabajo (que sí van, según el art. 127 fracción III de la LFT).
- Se les olvida el límite del 20% a trabajadores de confianza.
- No documentan nada: ni Comisión Mixta, ni actas, ni constancias.
- Y para rematar, el ISR lo calculan mal… o ni lo retienen.
¿Resultado? El pastel se les regresa en forma de inspección, multa o demanda.
¿Cómo evitar la indigestión?
- Asegúrate de que el cálculo venga de la declaración anual real.
- Asegura la integración y función de la Comisión Mixta; pide su acta final. Recuerda: es el blindaje legal que valida el cálculo ante todos.
- Entrega constancias claras a cada trabajador.
- Usa el método correcto para retener el ISR (sí, hay dos: Art. 142 o 174 del RISR).
Hacerlo bien no solo evita multas. Un reparto transparente y justo genera confianza, mejora el clima laboral y potencia la productividad.
Repartir sin reglas… es regalar problemas. La ley ya tiene la receta. Solo hay que seguirla.
Ricardo Ruiz
Director General en HITS Soluciones Especialista en nómina, cumplimiento laboral e inteligencia operativa de RRHH